Nube localizada en una infraestructura bajo demanda, en la que los servicios son utilizados y gestionados exclusivamente por un cliente. Una nube privada puede ser propiedad de la organización, gestionada y operada por ella misma o por un tercero y puede existir en las instalaciones o fuera de ellas. Las nubes privadas tratan de establecer un límite estrecho controlado alrededor de la nube privada basado en la limitación de los clientes a una sola organización.